una carta sin mandar

Hola

Ya se que solo hace un mes que te has ido, pero te echo muchísimo de menos, se que lo entiendes y lo único que podemos hacer es esperar, pero te extraño tanto, se me hace tan raro eso de no verte todos los dias aunque sea un ratito para tomar un cafe...

Los días se me hacen largos y como hace calor no puedo pasármelos durmiendo, tengo muy buenos amigos aquí , y disfruto mucho con ellos, no voy a negar que últimamente no paro de entrar y salir, pero no puedo dejar de pensar que seria mejor si tu pudieras vivir esas cosas conmigo.

El mejor momento del día es cuando hablamos, ya sea por movil, que suele terminar en un caos por la cobertura y porque yo estoy medio sordo, por messenger o por algún mensajito que te deje por ahí.

A veces me asusto y me da un poco de bajona, cuando piensas que estoy enfadado o molesto y no tengo forma de demostrarte que estoy bien, cuando tienes un dia malo y te pones algo negativo, y siento que quizás no vallas a volver o por tonterías como ver a dos amigos abrazados viendo una peli y se me salta alguna lagrimilla porque no puedo hacer lo mismo.

Se que soy ñoño pero no puedo evitarlo, estoy feliz y lo estoy desde que te conozco aunque hayamos tenidos nuestros mas y menos merece la pena, porque ya lo sabes eres mas que un amigo ( aunque no tengamos una palabra para llamarlo) y a la vez lo sigues siendo . Puedo confiar en ti, puedo contartelo todo y estas ahí cuando lo necesito ya sea para reñirme o para animarme o decirme las verdades a la cara. Eres lo mejor que tengo ahora mismo.

No tardes mucho en volver, vale?, nos quedan muchas cosas que hacer y sitios a donde ir. Quiero gastar mi tiempo contigo. Quiero olvidarme que soy un mapache y ser un pingüino.